Hoy vamos a hablar de los sujetadores de lactancia, algo que se hace totalmente indispensable para las mujeres embarazadas dado que sus pechos cambian de tamaño y se vuelven mucho más sensibles, algo que sigue durante el periodo de lactancia y que da nombre a este tipo de sujetadores que tanto facilitan la vida a las madres.
Los sujetadores de lactancia tienen su máximo beneficio a la hora de dar el pecho a los bebés. Su forma, su modo de apertura y su comodidad hace que sean los idóneos y los únicos recomendables para esta etapa de la vida. Tenemos muchos tipos de sujetadores de lactancia, pero desde aquí te vamos a dar algunos consejos para que elijas sólo los mejores, y no siempre los mejores implican ser los más caros.
Una primera toma de contacto con el sujetador de lactancia
Los sujetadores de lactancia existen desde hace mucho tiempo y por suerte, cada vez es más fácil encontrarlos en las tiendas de ropa interior, lo que hace que haya muchos más modelos y podamos encontrar sujetadores de nuestro gusto. Como ya sabemos, la talla del pecho puede aumentar desde el momento en que nos quedamos embarazada (véase los síntomas del embarazo) y probablemente los sujetadores que teníamos ya no sean tan cómodos como antes.
Es el momento entre elegir cambiar la talla del sujetador o comprar un sujetador de lactancia, aunque aún falten más de 8 meses para la llegada del bebé. Mi recomendación es que te anticipes y compres el de lactancia ya que te ahorrará un dinero en el futuro, ya que acabarás necesitando uno.
La talla es muy importante para que no apriete y el pecho vaya bien sujeto. Casi todas las marcas harán sujetadores de lactancia con la misma talla que teníamos previamente, pero adaptados a la media de as nuevas medidas, por lo que lo normal será que tengas que comprarte la misma talla que tenías, aunque esto no es siempre así porque cada una somos un mundo.
Una buena elección
Muchas te dirán que mejor con aros o mejor sin aros. No me voy a meter en esto porque algunas nos sentimos más cómodas con sujetadores sin aros y otras con ellos. Yo he tenido de los dos tipos y, aunque la forma del pecho “parece más bonita” con un sujetador con aros, me resultaban mucho más cómodos los otros. El tema de las costuras es mejor evitarlo, aunque la gran mayoría de ellos ya vienen sin costuras para aumentar la comodidad.
La recomendación que debemos darte es que para dormir utilices (en caso de hacerlo) sujetadores sin aros. No te preocupes si lo que te apetece es ir parcialmente desnuda de cintura para arriba durante las primeras semanas después del parto. Los pechos se vuelven muy sensibles y muchas veces nos molesta cualquier roce. Si tienes gente en casa y no puedes (debes) ir en topless, una camiseta de algodón ancha bastará para ir más cómoda que con un sujetador.
Lo importante es que vayamos cómodas con ellos. Que la talla sea la correcta es algo primordial para ello. No aceptes comprar un sujetador que en la tienda, al probarlo, no te ha resultado cómodo de primeras, porque no lo será en un futuro aunque la vendedora te diga lo contrario.
Tu pecho no debe sobresalir de la copa o apretarnos, ni siquiera quedar muy pequeño en la copa, lo que hará que la sujeción se reduzca y no sea tan cómodo como para lo que están destinados.
Algunas recomendaciones para la compra
Te dejamos algunas opciones de sujetadores totalmente diferentes, tanto en diseños como en precios.