Debido a los cambios hormonales y aumento del flujo sanguíneo que se presentan en esta etapa de la mujer, la retención de líquidos durante el embarazo en muchos casos es inevitable. Casi por finalizar el periodo de la gestación, de seis meses en adelante, podrá notar o habrá notado en algunas gestantes la hinchazón de manos y pies, como también brazos y piernas, este fenómeno se debe a una retención de líquidos y se presenta acompañado de hormigueos, palpitaciones, calambres y pesadez al caminar, siendo su mayor acentuación en el mes de verano debido al aumento del calor.
Dado que las embarazadas no pueden tomar gran parte de los medicamentos que se venden hoy en día (salvo sean los prescritos por su médico), lo ideal para desinflamar las hinchazones es siguiendo un tratamiento natural que no requiere mucho esfuerzo ni mucho gasto y la mencionamos en seguida.
Algunos tratamientos
A continuación hablaremos de algunos de los tratamientos que se pueden dar las embarazadas con el fin de intentar reducir su retención de líquidos.
- Darse un baño con agua fría ayuda a estimular el flujo sanguíneo, puedes tomar duchas completas o solo en la zona de las piernas o pies, colócalos sobre una tina con agua por media hora, te relajará bastante además de aliviar y desinflamar la hinchazón.
- Evita caminar mucho, solo moderadamente y usando un calzado cómodo, fresco y sin tacones que sobrepasen los cinco centímetros. Si te sientas, trata de o cruzar las piernas y de estar sentada por mucho tiempo.
- Realiza rotaciones de tobillos y luego mantén tus pies en alto por un tiempo de 20 a 30 minutos.
- Consume muchos líquidos: agua, zumos e infusiones.
- Toma comida que sea diurética como alcachofas o piña
- Modera la ingesta de sal en las comidas.
Si aún presentas signos de retención de líquidos, consulta con tu médico quien podrá darte alcances más precisos para combatir con esta fastidiosa hinchazón que en peores casos puede ser una preclamsia.